A Miami no le bastó con el triple-doble de King James: 26 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias en el 105-101 ante Washington. Los Wizards ganaron dos partidos de 15.
Con los pies reposando en un balde lleno de hielo, sus ojos examinando la síntesis estadística del juego, LeBron James rió un poco ante la idea de que su Heat de Miami pudiera aprender algo de un sorprendente revés ante los Wizards de Washington.
"No señor, no hay lección. Esto no es una lección para nosotros. Simplemente perdimos", aseguró. "Hemos visto y pasado por todo, así que no necesitamos una derrota para ponernos en un plan de 'Oh, recuperémonos'. Son cosas que ocurren".
Sin embargo, no demasiadas personas dilucidaron que se produciría este desenlace, en el que el peor equipo de la NBA salió a la cancha el martes y venció al Heat 105-101 respaldado por 22 puntos de Jordan Crawford, y a pesar del triple-doble de James de 26 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias.
Tal vez inspirados por la presencia junto a la cancha del quarterback novato Robert Griffin III de los Redskins de Washington, que intercambió un apretón de manos con James -seguidor de los Cowboys de Dallas- después del timbrazo final, los Wizards duplicaron su total de victorias en la campaña. Llevan foja de 2-13 gracias al que fue su segundo triunfo en los últimos tres partidos después de que iniciaron la temporada 0-12, el peor arranque en la historia de la franquicia.
LeBron James tuvo una actuación deslumbrante, pero no bastó para ganar (AP)
"Estoy tan contento por estos muchachos", dijo Randy Wittman, entrenador de los Wizards, quien consideró que tal vez esta sea la victoria más satisfactoria en su carrera al timón de un equipo.
Antes del partido le dijo a sus muchachos: “Las únicas personas que creen que ustedes tienen una oportunidad (de ganar) esta noche son las personas que están en este cuarto”. La sabiduría que prevalece, le dijo Wittman a sus jugadores, era que ellos "no tenían ninguna oportunidad de ganar este partido, y eso es lo que la gente decía... Podía escucharlo en las calles".
El Heat, campeón de la NBA, vio rota su racha de seis triunfos y su foja desmejoró a 12-4. "Uno sigue adelante", dijo Dwyane Wade, que anotó 24 puntos para Miami. "Se aprende de ello, pero uno no se convierte en un buen equipo al aferrarse a ciertas derrotas... o ciertos triunfos".
En otros encuentros de la noche del martes, Houston Rockets venció a Los Angeles Lakers 107-105 con 15 puntos del argentino Carlos Delfino, mientras que Minnesota le ganó 105-88 a Philadelphia, Oklahoma 117-111 a Brooklyn, Indiana 80-76 a Chicago y Memphis 108-98 a Phoenix.