UN TALIBÁN CAMUFLADO HIRIÓ A DOS BRIGADIERES GENERALES Y A OTROS 13 OFICIALES DE LA ONU
El fallecido general
estadounidense Harold Greene, graduado en ingeniería, estaba en su
primer misión en una zona de combate y trabajaba en el entrenamiento de
las fuerzas afganas.
EFE
Washington/Tomado de Listin Diario
El Pentágono confirmó ayer
martes que un general estadounidense murió en un ataque en Afganistán,
la baja estadounidense de mayor rango desde los atentados del 11 de
setiembre de 2001.
El departamento de Defensa
identificó al atacante, que vestía uniforme, como un soldado afgano, que
resultó muerto tras abrir fuego.
“Puedo (…) confirmar que entre
las víctimas hay un general estadounidense muerto”, dijo a los
periodistas el portavoz del Pentágono, contraalmirante John Kirby, quien
agregó que no lo identificaría.
Destacó que se trata del oficial
estadounidense de mayor rango muerto desde los ataques del 11 de
setiembre de 2001, cuando el teniente general Timothy Joseph Maude murió
en el atentado cometido con un avión comercial estrellado contra el
edificio del Pentágono.
The Washington Post identificó al fallecido como el general de división Harold J.
Greene, que se desempeñó en las adquisiciones de sistemas en el cuartel general del Ejército en Estados Unidos.
Desde la guerra de Vietnam
ningún general estadounidense había muerto en combate, aunque militares
del más alto rango sirvieron en Irak y Afganistán.
Kirby agregó que el atacante terminó muerto, pero dijo que no contaba con más detalles del hecho.
“Creemos que el atacante era un
soldado afgano”, afirmó. Un oficial estadounidense que pidió anonimato
dijo a la AFP que unas 15 personas fueron heridas; de ellas, ocho son
estadounidenses.
Se desconocen las nacionalidades
del resto de víctimas, pero el oficial dijo que incluían afganos, y
Alemania señaló que uno de sus generales fue herido.
Kirby describió el ataque como
un incidente aislado y reconoció a las tropas afga- nas por su trabajo
en la seguridad durante las elecciones nacionales.
“Es imposible eliminar, eliminar
por completo, esta amenaza, creo, particularmente en un lugar como
Afganistán, pero puedes trabajar duro para atenuarla”, dijo sobre estos
ataques internos.
Este es el segundo ataque de
este tipo en lo que va de año, tras la muerte en febrero pasado de dos
soldados de la Misión de la ONU en Afganistán (ISAF) a manos de dos
desconocidos que vestían el uniforme de las fuerzas de seguridad
afganas.
INFORME DESDE LA CASA BLANCA
El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, señaló en su rueda
de prensa diaria que el presidente estadounidense, Barack Obama, ha
sido informado de lo ocurrido por el general Joseph Dunford, comandante
de las tropas de la OTAN en Afganistán.
Earnest añadió que pese a los
“progresos” en la salida de EE.UU. del conflicto en Afganistán, el
atentado es “un doloroso recuerdo del sacrificio de nuestros hombres y
mujeres uniformados por el país”.
En 2012 hubo más de medio
centenar de ataques, aunque la tendencia disminuyó en 2013, al calor del
papel cada vez más secundario que desempeñan las tropas extranjeras en
Afganistán, país del que tienen previsto retirarse completamente en este
año.
El conflicto en el país asiático
se encuentra en uno de los momentos más sangrientos desde la invasión
estadounidense que propició la caída del régimen integrista talibán a
finales de 2001 y a pocos meses de la retirada de la ISAF a finales de
año.