No es una tarea fácil de abordar. Es necesario contar con ese interés genuino que brota al toparse con una historia extraordinaria, con un personaje atípico, con una escena fuera de lo habitual; pero no basta con sentir la pasión, se debe trabajar la técnica para perfeccionar la pluma, para poder transmitir al lector esa misma pasión que sentimos al encontrarnos con esas grandes historias que nos motivan a escribir.
Para empezar, es necesario tener en cuenta las siguientes recomendaciones a la hora de escribir una crónica:
Investiga en profundidad:
Darse el tiempo para la investigación da la materia prima necesaria para construir un buen texto. Es la mejor manera de conocer la situación en profundidad, con conversaciones largas con sus protagonistas, con su entorno, recorriendo el paso a paso de sus vidas sin apuros, dejándose llevar por la experiencia a conocer, sin pre-conceptos.
Descripciones profundas:
Trata de ambientar las situaciones. El aire, el olor, los colores, los sonidos del ambiente, todo. Los detalles de la ambientación generan el clima de la narración, y por eso es necesario el detalle, para poder así sumergir al lector en ese mismo mundo desconocido de nuestra crónica.
Pensar en acciones:
La crónica es un texto vivo. Las escenas transcurren en acciones y es trabajo del escritor lograr que el lector pueda recorrer los hechos, detenerse en ciertos puntos particulares, bailar, sentir, vivir junto con nuestros personajes. No se trata de redactar anteponiendo verbos sino de lograr un ritmo entre escenas que permita transitar el espacio y el tiempo de manera amena.
Ver a partir de la mirada del otro:
Para escribir una crónica es necesario empaparse de una situación real en su totalidad, y eso incluye a los personajes de manera íntegra: saber ponerse en el lugar del otro, entender qué siente, qué le pasa, cómo vive. Dejarse inundar por las emociones ajenas y transmitirlas vuelve interesante el escrito, atrapante.
No excederse en las descripciones:
El texto no puede convertirse en un listado de sinónimos, y para ello es importante no caer en el error de sobre-adjetivar las escenas o detenerse en detalles innecesarios. Piensa en el significado de cada palabra y lo que deseas transmitir con esta.
¿Para un escritor es importante la constancia?
La crónica, como todo género, se construye siguiendo la técnica, pero también a partir de la práctica. Vivir a la pesca de historias atrapantes, estar siempre listo a investigar y seguir ese bichito que te empuja a coger papel y lápiz, escribir, corregir, leer, volver a escribir.